El Águilas Fútbol Club empató por un gol a uno ante el Club de Accionariado Popular Ciudad de Murcia, en el encuentro correspondiente a la jornada diez del campeonato en el Grupo XIII de Tercera Federación. Los blanquiazules, en su regreso al Rubial casi un mes y medio después, se adelantaron de penalti en el tramo inicial y dominaron en la primera mitad, pero diez minutos fatídicos tras la vuelta de vestuarios trajeron consigo el gol de los visitantes, el cual, a la postre, se acabaría convirtiendo en el empate definitivo. El punto sirve a los hombres de Sebas para mantener la segunda plaza de la clasificación, si bien ya a más de un partido de distancia con el líder, La Unión.

Tras varias semanas poniéndose guapo, el césped del Rubial recibió a los suyos en las mejores condiciones posibles. Y el Águilas, todo hay que decirlo, empezó el partido rayando a la altura que se esperaría de un tapete así. Los de Sebas iniciaron con balón, presionando en bloque alto y, en definitiva, apretando para conseguir pronto el gol que abriese la lata y convirtiese la noche en un plácido viaje hacia el liderato. Y en el 9’, lo encontraron. Un derribo catedralicio y apenas protestado por los visitantes sobre Víctor Fenoll acabó en un penalti que el nuevo especialista blanquiazul, Góngora, convirtió en el 1-0 desde los once metros.

El Águilas empezó entonces a navegar en las tranquilas aguas del marcador a favor. Los blanquiazules se hicieron dueños absolutos de la pelota, aunque es de recibo apuntar que, en honor a la verdad, el dominio no acababa de concretarse en ocasiones claras de gol. Un libre directo del propio Góngora y un balón que se envenenó tras ser despejado por un defensor del Ciudad de Murcia fueron lo más parecido que los blanquiazules materializaron antes del descanso. Y a la vuelta del mismo, la película cambió por completo.

Lo malo de la placidez es que es atractivamente parecida a la comodidad y tal vez en el fútbol actual no haya confusión más terrible. Los blanquiazules salieron mal a la segunda parte. A los errores en defensa, se sumaron la falta de fluidez en ataque y la diferencia de intensidad en comparación con un Ciudad de Murcia que cambió el chip en el descanso y saltó al verde con el claro objetivo de darle la vuelta a la situación. Fueron sólo diez minutos, sí, pero suficientes para que el Águilas se fuera -al menos, momentáneamente- del partido y viera cómo se lo empataban. Dos avisos perdonados y el tópico de “a la tercera, fue la vencida”. En el 52’, Dani Rivas, un ex del filial blanquiazul, remató a la red un córner que, pese a las protestas de los que reclamaban una mano del jugador del Ciudad de Murcia, se convirtió en el 1-1 definitivo.

Los hombres de Sebas despertaron espoleados por ese tanto, pero lo que antes era serenidad se tornó en una crisis de ansiedad que pareció acortar un partido al que, con todo, todavía le quedaba más de media hora. El Águilas lo intentó, sobre todo a través de un siempre voluntarioso Víctor Fenoll, pero por el motivo que fuese, no le llegó ni para ganar, ni para transmitir del todo la sensación de ser el auténtico merecedor de los tres puntos. Un balón a la madera en el 70’ y un disparo de Góngora que Manu Vidal desvió a córner sobre la bocina fueron lo más cerca que el Águilas estuvo de hacerse con una victoria que, en honor a la verdad, también pudo haberse llevado un buen Ciudad de Murcia. Espera el Imperial.

Águilas Fútbol Club: Iván Buigues, Blas, Óscar Castro, Dani Pérez, Góngora, Ramón Arcas (Mati, 84’), Borja García (Sandji Baradji, 67’), Cristo Martín, Adri (Diego López, 67’), Víctor Fenoll y Aitor Pons (Casi, 45’; Álex Peque, 75’).

Club de Accionariado Popular Ciudad de Murcia: Manu Vidal, Fran, David Jiménez, Alcántara, Mario (Carrillo, 86’), Dani Rivas, Parra, Álex Melgar (Fran Martínez, 55’), Asen (Raúl, 86’), Samu y Álex Pascual (Diego, 64’).

Árbitro: Izquierdo García. Amonestó a Ramón Arcas (Águilas) y a Alcántara, David Jiménez, Mario, Diego, Samu y el técnico Paco Lorca (Ciudad de Murcia).

Goles: Góngora (1-0, 9’, p.) y Dani Rivas (52’).