El Águilas Fútbol Club venció por dos goles a uno al Yeclano Deportivo en el encuentro disputado ayer en el Estadio Centenario El Rubial y correspondiente a la primera jornada del campeonato en el Grupo IV de Segunda Federación. Los blanquiazules pusieron tierra de por medio en apenas tres minutos, con sendos tantos de Mario Abenza y Chris Martínez. El visitante Borao, ya en el segundo tiempo, hizo el único gol de un Yeclano que mejoró tras el descanso.
Si usted está leyendo esto y, por cualquier circunstancia, llegó tarde a su asiento en El Rubial, permítanos decirle que se perdió uno de los inicios de partido más fulgurantes que se han vivido en este histórico estadio en los últimos años. Ni siquiera se había cumplido el primer minuto de encuentro cuando el árbitro del mismo, Fernando Moreno (ya saben que esta temporada la RFEF ha eliminado la clásica denominación con los dos apellidos), señaló una falta a favor de los hombres de Adrián Hernández.
No parecía zona de disparo, pero sí invitaba a probar la efectividad de la pizarra del nuevo cuerpo técnico. Y así, apenas 70 segundos después, Mateo Enríquez botó dicha falta y la puso con música al segundo palo, donde Uri, que firmó un partido soberbio a todos los niveles, se adelantó a toda la línea defensiva y cedió para que Mario Abenza, a placer, hiciera el 1-0.
Casi no hubo tiempo para celebrarlo, pues, en el 3’, Salcedo lanzó un balón largo -con tanta premura como precisión- a la carrera de Chris Martínez, quien tiró de talento para deshacerse de dos contrarios y clavar la pelota con violencia junto al palo izquierdo de la portería defendida por Acín. Era el 2-0 y la confirmación del éxtasis para una grada que escuchó la llamada de su entrenador la pasada semana en los medios del club y respondió de la mejor manera.
La sensación, además, era de que el Águilas tenía el partido justo donde quería. Y no sólo a nivel de resultado, que parece obvio, sino también en un sentido más anímico. Los hombres de Adrián Hernández parecían sentirse superiores y, lejos de bajar el pistón, buscaron un tercer gol que estuvo a punto de llegar en sendas acciones de Javi Pedrosa y Keita. El Yeclano, por su parte, se reencontró a partir de la media hora, rubricando su mejoría tras la vuelta de vestuarios.
Una moto… y más adelante un coche
El descanso del partido interrumpió el juego y, probablemente, las sensaciones del cuadro blanquiazul, pero no la fiesta que se estaba viviendo en El Rubial. Así, se sorteó sobre el césped la primera de las 17 motos que el presidente del club, Alfonso García, ha prometido rifar en todos los encuentros que el primer equipo dispute como local. El sorteo, además, se completó con un anuncio sorpresa: en la última jornada, aquellos que vayan adquiriendo papeletas para conseguir las motos a lo largo de la campaña también optarán a llevarse a sus casas un Audi A1. Ahí es nada.
Aprovechando el símil automovilístico y aplicándolo al fútbol, fue el Yeclano el que arrancó la segunda mitad con una marcha más que su rival. No en vano, en el mismo minuto en el que Mario Abenza celebró el primer gol de la tarde, Borao hizo lo propio para el conjunto del Altiplano con un fuerte cabezazo ante el que nada pudo hacer Salcedo.
El tanto espoleó a los visitantes, que se hicieron entonces dominadores del juego y el balón hasta que Adrián Hernández, en el 65’, reajustó a los suyos y cambió a un esquema de tres centrales que acabó por anular los ataques del Yeclano y, a la postre, asegurar una victoria que pudo ser más amplia si los blanquiazules hubieran aprovechado alguna de las ocasiones que dispusieron a la contra. Aitor y Kevin Manzano protagonizaron las más claras.
Esto acaba de empezar, por supuesto, pero la sensación es que ayer no sólo se consiguieron los primeros tres puntos de la temporada, sino que, de camino, el equipo dejó multitud de detalles y situaciones que invitan al optimismo y, lo más importante en la humilde opinión del que escribe, despertó a una afición, la del Rubial, que echaba de menos el fútbol en general y la intensidad de los suyos en particular. Y así, con grada y plantilla de la mano, todo es mucho más fácil. Pinta a que va a puede ser una temporada muy bonita, por lo que, como reza el slogan de la campaña de abonados, “caminemos juntos” por ella.
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Águilas Fútbol Club: Salcedo, Johan Terranova, Antonio Sánchez, Javi Pedrosa, Mario Abenza, Chris Martínez (Seth Vega, 50’), Pipo (Kevin Manzano, 65’), Uri, Keita (Aitor, 50’), Mateo Enríquez (Ebuka, 65’) y Ángel López.
Yeclano Deportivo: Acín, Jordan Hernández (Nani, 75’), Fadel, Xabi, Totti (Puri, 75’), Sergio Carrasco, Jorge Domínguez (Jaime Fernández, 90’), Fedior (Cordero, 83’), Borao, Toni Jou (Tudela, 90’) y Josema.
Trío arbitral: Fernando Moreno, David Arévalo y José Antonio Huertas.
Goles: 1-0, Mario Abenza (2’); 2-0, Chris Martínez (3’); 2-1, Borao (47’).
Tarjetas amarillas: Fedior, Xabi, Ángel López, Johan Terranova, Toni Jou, Josema, Puri y Hyeon-Jun Park.
Tarjetas rojas: Víctor Burdalo, segundo entrenador del Yeclano.
Incidencias: El Águilas Fútbol Club sorteó una moto en el descanso y anunció que en el último partido de la temporada también se sorteará un coche.