El Auditorio y Palacio de Congresos Infanta Doña Elena de Águilas acoge, hasta el próximo 22 de junio, “El buen tiburón”; una exposición póstuma de Javier Rambla que supone un homenaje a toda su vida.
Con la magia, el color y todo el mundo onírico de los cuadros de Javier, nos acercamos un poco más al Javier más íntimo, el que transita por un mundo de luz propia en la mayoría de las veces a través de los pájaros voladores que tanto le gustaban.
Es un canto a la vida y a la forma tan peculiar de entenderla, tal y como Javier le transmitió a familiares y amigos, pero sobre todo a Puri, su compañera de vida.
La recaudación integra de esta muestra se destinará a la Asociación Nacional de Síndromes Ehlers-Danlos e Hiperlaxitud.